Tras presentar los iPhone 5S y 5C, Tim Cook, CEO de Apple, enseñó el iPad Air y el iPad mini con pantalla Retina este martes.
Los nuevos dispositivos se renuevan por completo en su interior y doblan en rendimiento al actual A6X que monta el iPad 4 retina: las nueva tabletas utilizan el procesador A7. Se trata de un chip dual core a 1,3GHz, el primero con arquitectura de 64 bits en llegar al mercado de dispositivos móviles.
Con la incorporación de un chip de 64 bits, Apple conseguirá que sus tabletas compitan directamente con notebooks de gama baja, ya que el A7 se asemeja en potencia a un procesador básico de Intel. Ahora, el iPad 5 se sitúa por encima de todos sus competidores en el mercado en cuanto a potencia y rendimiento.
Al hablar de un procesador de estas características, Apple asegura: "Piensa, por ejemplo, en los mundos imaginarios de los videojuegos. Ahora las texturas y las sombras son mucho más realistas y hasta el más tímido rayo de sol se refleja en el agua de un charco. Todo lo que ves es tan real que casi lo puedes tocar".
La mejora de este procesador también se siente en la cámara, que ahora es capaz de duplicar la velocidad del enfoque automático. "También consigue una captura de fotos más veloz y hasta más fotogramas por segundo. Y si te estás preguntando por la autonomía, buenas noticias: no se resiente ni lo más mínimo porque el A7 está diseñado para ser ultraeficiente", remató Apple.
Al A7 de las iPad debe sumárseles el chip M7, que también debutó con el iPhone 5s. Está encargado de medir los datos del giroscopio, el acelerómetro y la brújula. De esa manera, las aplicaciones que emplean esos elementos se comportan de manera más adecuada. Como esa función estaba antes a cargo del procesador principal, la derivación de las tareas mejora el rendimiento de la batería. Según Apple, los nuevos iPad ofrecen una autonomía de 10 horas.