Pese a la presión internacional, el gobierno ruso anticipó que no intermediará ante la Justicia de su país por los tres activistas de Greenpeace que se encuentran detenidos por haber abordado una plataforma petrolera en el Océano Ártico.
"La Justicia debe seguir su curso y no hay que interferir", señaló Serguie Lavrov, ministro de Relaciones Exteriores de ese país, al ser consultado al respecto, según consigna la agencia internacional de noticias EFE.
Las declaraciones del canciller ruso se produjeron luego de que mantuviera un encuentro con su par belga Didier Reynders, quien le acercó la preocupación de su país por un compatriota que se halla entre los detenidos acusados por el cargo de "piratería" Así, pese a que días atrás el propio Vladimir Putin había reconocido que es "totalmente evidente que no son piratas", el gobierno de ese país dio por clausurada la posibilidad de que abogue a favor de los ambientalistas.
La decisión fue comunicada en momentos en que la Justicia de ese país define si otorga la libertad bajo fianza a los ambientalistas que se encuentran detenidos a la espera de un juicio que podría condenarlos hasta a 15 años de prisión.
El lunes, los tribunales de Murmansk rechazaron la apelación presentada por la organización ambientalista para que se le concediera la libertad bajo fianza a Camila Speziale. "Soy inocente y no entiendo de qué se me acusa. Estoy arrestada por algo que no hice. Realmente quiero volver a mi país y seguir trabajando y estudiando", dijo a los jueces la joven argentina.
En tanto, se prevé que este jueves alrededor de las 7:30 (hora argentina) el mismo tribunal defina si concede el beneficio a Hernán Pérez Orsi, el otro argentino que se encontraba a bordo de la embarcación Artic Sunrise cuando se produjo la protesta.
