El Gobierno acelera el ritmo de devaluación y los efectos se hacen notar de forma inmediata en el dólar "tarjeta". La divisa que los argentinos pagan por los consumos en el exterior, pasajes y paquetes turísticos ya se ubica en los $6,98, luego de que el dólar oficial subiera un centavo a $5,82 en bancos y casas de cambio.
Este dólar "turista" se calcula por el recargo del 20% de la AFIP, una percepción que el organismo cobra como adelanto del impuesto a las Ganancias y Bienes Personales. Pero como los bancos y las agencias de turismo toman una cotización algunos centavos por encima del dólar oficial en la pizarra del Banco Nación, incluso ya superó la barrera de los 7 pesos.
El 2013 comenzó con un dólar oficial a $4,92, que se traduce en un alza de 90 centavos ó 18,4% en lo que va del año. Y antes del cepo cambiario en octubre de 2011, el tipo de cambio se negociaba a $4,24 por dólar, por lo que el dólar para viajar al exterior es un 65% más caro.
En este contexto, el ritmo de suba del tipo de cambio oficial que marca el Banco Central supera el 30% anual. Según los futuros del dólar, la divisa oficial finalizará a $6,20 el 31 de diciembre, por lo que el dólar "tarjeta" comenzará el periodo de vacaciones en torno a los 7,40 pesos para los que planeen veranear en el exterior. Esta proyección es válida si la AFIP no aumenta el recargo, como confirmó el titular del organismo Ricardo Echegaray.
Más allá de las declaraciones oficiales, el último informe de Econviews consideró que una parte del mayor deterioro que se observa en la compraventa de divisas del Banco Central durante los últimos meses "se explica por el adelantamiento de gastos en pasajes y paquetes turísticos, ante la posibilidad de que tras las elecciones se implementen mayores restricciones".
La consultora del economista Miguel Kiguel también barajó la posibilidad de que se encarezca el tipo de cambio vigente para el turismo. "El deterioro anual de u$s 8.327 millones que registra la compraventa de divisas se explica prácticamente en partes iguales por mayores importaciones de energía y gastos por turismo", señaló el informe, marcando la menor capacidad del BCRA para hacerse de divisas en el mercado cambiario.
No obstante, hay especialistas que consideran que la fuga de dólares por turismo superará a la salida de divisas por importación de energía durante 2013. Un estudio de la consultora Econométrica calculó que el déficit energético se ubicará en torno a los u$s7.500 millones, mientras que el turístico podría arrebatarle hasta u$s10.000 millones al Central.
El dólar libre se negocia a $9,55 en el mercado, con una brecha del 34 por ciento con el dólar "tarjeta". Incluso, las agencias de turismo aseguraron que la compra anticipada de paquetes se extiende hasta mediados de 2014, a modo de sacar provecho a la actual cotización de esta divisa con recargo del organismo recaudador.
El sector del turismo espera cambios en la materia tras las elecciones legislativas de octubre pues es evidente que el cepo no frenó la sangría de dólares. Ya se fueron u$s4.530 millones por turismo en el primer semestre, un incremento del déficit de 157% contra el mismo periodo de 2012, según datos del Balance Cambiario del Central.
A fines de este mes, el cepo cambiario cumplirá dos años en la Argentina, cuando el entonces ministro de Economía Amado Boudou anunció que se autorizaba la compra de moneda extranjera a quienes tuviera la capacidad contributiva para hacerlo. Mientras que en octubre de 2011 la brecha cambiaria entre el oficial y el paralelo era de tan sólo un 5%, hoy se ubica en un 64 por ciento.
El dólar "tarjeta" se originó casi un año después, cuando se estableció el recargo del 15% sobre los consumos en el exterior. En marzo de 2013 la percepción subió al 20%, extendiéndose a pasajes, paquetes turísticos y otros servicios vinculados al sector. Según fuentes del sector consultadas por Infobae, un aumento en el recargo generaría una caída importante en la contratación de viajes y sobre todo en los corporativos.