Comienza la etapa de definiciones en el juicio que mantienen la Argentina y los denominados fondos buitre. A partir de ahora, todo depende de lo que haga o deje de hacer la Corte Suprema de Justicia de EEUU. Los escenarios son varios y en el Gobierno esperan que los tiempos procesales estiren la definición de fondo. Está descartado la obtención de un fallo favorable, con lo cual la estrategia oficial es que mediante presentaciones legales se logre no tener palos en la rueda para pagar la deuda en lo que resta de este año y gran parte del 2014. Estirar lo máximo posible la sentencia es la premisa oficial.
Por lo pronto, este lunes la Corte retoma su actividad ordinaria luego del receso de verano. Es la primera conferencia de varias que realizará en esos días y en las que se analizarán más de 100 casos. Esas conferencias no son audiencias públicas, sino reuniones internas de todos los jueces de la Corte, similares a la mecánica de acuerdos que siguen nuestros propios tribunales colegiados. Estas reuniones de acuerdo permiten el debate de los casos entre los distintos jueces de la Corte Suprema.
En este marco, la Corte Suprema comenzará a analizar los casos que están listos para sentencia ("fully briefed"). Dentro de éstos está el certiorari presentado por Argentina en contra de la sentencia del 26 de octubre de 2012, en la que se resolvió que Argentina viola la cláusula de pari passu al continuar pagando los bonos emitidos en los canjes y al no pagarles a los buitres. Como este caso se trata junto con muchos otros, puede que no se tome una decisión el mismo día sino que la decisión se extienda, inclusive hasta la semana siguiente.
La Corte Suprema puede tomar distintas decisiones respecto al "certiorari" o pedido elevado por Argentina. Algunas decisiones posibles son que simplemente la Corte lo rechace, que acepte tomarlo y resolverlo, que no diga nada -por ejemplo, porque decide, como lo propuso Argentina, tratarlo junto con el certiorari que eventualmente se plantee ante un posible rechazo del pedido de revisión (ante todos los jueces de la Cámara de Apelaciones y no sólo los 3 que fallaron) de la decisión del pasado 23 de agosto-, que le pida opinión al gobierno de los Estados Unidos. En este último caso el gobierno de Obama no tiene un plazo concreto para dar su opinión.
Sea como fuese, no se espera que se conozca públicamente la decisión de la Corte el mismo día sino que habrá que esperar. En todo caso, destacan en el gobierno argentino, en esta etapa no habrá definiciones que disparen o puedan disparar un default de la deuda, ya que como se dijo el Gobierno se guarda una apelación adicional al máximo tribunal. Este es un dato no menor ya que hay vencimientos de bonos en dólares bajo ley Nueva York (la afectada en este juicio) durante los próximos meses. Hay vencimientos del Global 17 el 2 de diciembre por u$s47 millones y el 31 de diciembre hay pagos del Discount en dólares por otros 157 millones de dólares. No habría riesgo a que esos pagos queden involucrados en el litigio.
En simultáneo, pero en Londres, será interesante conocer las reflexiones de los principales estudios de abogados que siguen el caso argentino, quienes harán un evento ese día sobre el juicio y lo que vendrá por parte de la Corte. Allí estarán presentes Yannis Manuelides (de Allen & Overy), Steven Froot (Boies, Schiller and Flexner), Casey Reckman (Credit Suisse), Julian Ku (Maurice A. Deane School of Law, Hofstra University) y Antonia Stolper (Shearman & Sterling).
Hay unanimidad entre los principales estudios de abogados del exterior acerca de que este proceso legal continuará durante bastante tiempo, y que la decisión final de la Corte (tomando la próxima apelación que hará el país) retrasaría un fallo final hasta la próxima sesión de octubre de 2014. "La Argentina tiene la motivación para retrasar el proceso de apelación, siempre y cuando sea posible y no es probable que presente una segunda petición de revisión ante el Tribunal Supremo hasta que el segundo tribunal de apelaciones de distrito decida sobre su solicitud en banc", explican los abogados del exterior.
Otro tema no menor es qué pasará con la "sentencia en suspenso" o "stay" en medio de todo esto. Los abogados dicen que no hay chances de que se levante la suspensión de la medida en esa instancia. Los fondos buitre, en contra de lo que trascendió en un momento, no están pidiendo que se levante la medida en suspenso sino que se busquen activos del país para pagar (el proceso llamado discovery). Los abogados dicen que sólo podría levantarse cuando la Corte trate el segundo fallo en contra que tiene el Gobierno, o sea el del 23 de agosto que será apelado, sobre la fórmula de pago. Esto es parte del plan de estirar la definición total sobre el tema. Por eso en Economía creen que pasarán gran parte.