La serie de culto Breaking Bad llega a su fin este domingo. Con el penúltimo episodio, "Granite State", el drama cosechó 6,6 millones de espectadores y opacó el final de Dexter.
En el último capítulo emitido en los EEUU, Walter White (Bryan Cranston) piensa en entregarse a las autoridades en un bar, pero cuando ve por televisión una entrevista a sus ex socios Elliot y Gretchen Schwartz, las palabras de ellos lo motivan a abandonar la idea de rendirse y, en su lugar, vuelve a Albuquerque con un sentimiento de venganza.
La aparición de Gretchen y Elliot, según explicó el creador de la serie Vince Gilligan, es fruto de una conversación con Kevin Cordasco, un adolescente que murió de cáncer y era un gran fanático del programa.
El reparto de Breaking Bad y Gilligan visitaron, meses atrás, a este joven. "Kevin era nuestro fan número uno. El primer día que pasé con él le pregunté: '¿Hay algo que eches de menos en el programa?'", explica Gilligan. Cordasco le respondió: "¿Sabes qué? Quiero saber más de Gretchen y Elliot". "El mero hecho de que Kevin mencionara a Gretchen y Elliot nos llevó a reintroducirlos en la historia", contó el creador de la serie.
Durante aquella visita, Gilligan ofreció a Kevin contarle el final del programa, pero el adolescente declinó la oferta para verlo él mismo. En su honor, uno de los capítulos fue dedicado a él. Breaking Bad da su adiós definitivo el próximo domingo con "Felina", el último episodio, que revelará el destino de Heisenberg tras cinco temporada exitosas.