"Bridas tiene mucho interés en participar. Ordenaron estudios, pero demandan un año y esperan ver los beneficios que da el Gobierno argentino a la inversión", indicaron fuentes diplomáticas del país asiático.
Después del acuerdo entre la petrolera argentina y la estadounidense Chevron, China se mostró muy dispuesto a sacar tajada de las opciones que se abren.
Los voceros diplomáticos confirmaron que informes internacionales le aseguraron al gobierno chino que las reservas de petróleo y gas no convencional en ese campo argentino son "formidables".
China tiene tres compañías petroleras de propiedad estatal, Sinopec y CNPC, CNOOC, pero para evitar competencia interna la que interviene en el proceso argentino es la última, debido a que ya tiene operaciones en el país a través de Bridas, consorcio en el que está asociado con la familia Bulgheroni.
Las tratativas se dan en un contexto en el que Chevron ya firmó un acuerdo, en tanto que la semana pasada el gobierno neuquino habilitó el plan de desarrollo del yacimiento gasífero El Orejano -ubicado en el noroeste del departamento de Añelo-.
De esa forma, se dio un paso más de cara a la firma de un acuerdo entre YPF y la gigante petroquímica Dow Chemical. Esta empresa ya firmó un memorando de entendimiento -MOU, por sus siglas en inglés-, en el marco de los mismos pasos legales que dio en su momento Chevron, y que se traduciría en este caso en una inversión por alrededor de 600 millones de dólares.
Según publicó el diario Río Negro, en esta oportunidad, se trata del primer plan de desarrollo intensivo de shale gas de YPF, que -desde un pozo exploratorio en este yacimiento- ya en febrero comenzó a aportar gas.
El volumen de gas que aporta El Orejano por ahora es bajo: entre 250.000 y 300.000 metros cúbicos diarios, pero se espera que una vez puesto en marcha el nuevo proyecto aporte dos millones de metros cúbicos de gas seco.
A fines de marzo se firmó el MOU entre el CEO de YPF, Miguel Galuccio, y el representante de Dow para la Región Sur de Latinoamárica, Jorge La Roza. Desde entonces, ambas empresas avanzaron con las negociaciones de cara al "joint venture" donde YPF cederá el 50 por ciento de su participación para el desarrollo del yacimiento.