Alcanzó el crecimiento más significativo desde el tercer trimestre de 2011, a partir de la superación de los efectos de la sequía y la firmeza de los aportes del gasto del Gobierno y de la expansión sostenida del sistema financiero.
Superó con creces a las estimaciones privadas, las cuales no sólo se ubicaron tres puntos porcentuales por debajo, sino que también anticiparon que en los meses siguientes se asistió a una brusca desaceleración, al comenzar a "desaparecer el efecto estadístico" de comparar con niveles negativos de un año antes.
Entre los productores de bienes sobresalieron en el segundo trimestre los impulsos que recobraron el agro y la actividad pesquera. En el primer caso pasó de una contracción de 18,6% entre abril y junio de 2012 a un avance de 26,8% un año después, mientras que en el segundo, trocó una merma de 25,3% a una suba de 51,6 por ciento.
En los meses siguientes se asistió a una brusca desaceleración
Esa dinámica arrastró la actividad del comercio, que de un virtual estancamiento en el segundo trimestre del año anterior se elevó a 14,2%. Más atenuado fue el efecto sobre el transporte y la actividad logística, que pasó de crecer 5,1% a 9,1%, por efecto de la recuperación más atenuada de la construcción y de la industria manufacturera.
La actividad financiera consolidó su rol de ser el que más contribuyó al crecimiento de la generación de riqueza, aunque mucho tiene que ver el efecto de la subestimación de la inflación.
El rol del consumo global
En la demanda global se observó una variación positiva del 4,4% en las exportaciones de bienes y servicios reales y una suba del 16,2% en la inversión interna bruta fija.
El alza del consumo público fue del 8,6%, mientras que el consumo privado aumentó 9,2%, a partir de los incentivos que otorgó la política económica con la actualización de los montos de las asignaciones por hijo, la movilidad jubilatoria y el atraso cambiario respecto de la dinámica de los precios y salarios, que indujo a mayor demanda de productos importados.
La estimación provisoria del Indec de la Inversión Interna Bruta Fija del segundo trimestre de 2013 arrojó un incremento sustentado en un avance de 4,8% en el apartado construcciones y 30,5% en equipo durable de producción. Dentro de este último agregado, para el componente nacional se estimó un crecimiento del 22,8% y para el componente importado una suba del 37,5 por ciento.
Pago cupón PBI
Privados esperan correcciones bajistas a precios de 2003
Pese a la enorme brecha que se abrió entre las mediciones oficiales y privadas de la capacidad de generación de riqueza por parte del conjunto de los agentes económicos, lo relevante para los bonistas que ingresaron a los canjes de deuda de 2005 y 2010 es el dato del Indec. Y si dispara una suba de más de 3,26% en términos reales se verán favorecidos con el cupón de renta PBI, cuyo valor se estima entre 3.300 y 4,500 millones de dólares, en los últimos días de 2014, según sea la magnitud del crecimiento informado.
No obstante, entre los privados, como es el caso de la Fundación FIEL, muchos arriesgan que en algún momento del año próximo el Indec procederá a introducir cambios en el cálculo de las cuentas nacionales, que desde hace diez años se hace a precios de 1993, por otra base a precios de 2003, y determinará el crecimiento final de este año será menor no sólo al 5,1% que se fijó como punto de partida del Presupuesto 2014, sino incluso del señalado 3,26%, dada la situación de apremio de divisas que se proyecta a un año en las arcas del Banco Central.