El sensor de huellas digitales fue una de las novedades más relevantes del iPhone 5S, el smartphone de alta gama que Apple dio a conocer el martes en su campus de Cupertino.
Sin embargo, la característica suscitó dudas acerca de las potenciales implicancias en materia de privacidad y respecto de la información de usuarios que pueden recoger los dispositivos.
En un video de Apple sobre el smartphone, Dan Riccio, ingeniero de hardware de la empresa, destacó las ventajas de la huella digital como contraseña y explicó que el "botón es capaz de tomar, en esencia, una imagen de alta resolución de tu huella digital", al tiempo que agregó que los datos sobre huellas dactilares se guardan encriptadas en el chip A7 del iPhone 5S.
Sin embargo, un portavoz de Apple aclaró que el lector de huellas digitales que incorporó el iPhone 5S no almacena imágenes reales de las huellas digitales de los usuarios, sino que solo guarda "datos de las huellas digitales", según informa hoy The Wall Street Journal.
Asimismo, Apple sostuvo que, en la actualidad, no permite a aplicaciones de terceros utilizar el escáner. La empresa además afirmó que los usuarios deben igualmente tener una contraseña numérica. El iPhone se las pedirá cuando no haya sido desbloqueado en 48 horas o haya sido reiniciado y no podrá ser activado con la huella digital.
Acerca del funcionamiento del sensor, el portavoz de la firma advirtió que no funciona con dedos mojados con cremas humectantes, sudor y otros líquidos.