El ahora reemplazante de Bergoglio en el arzobispado de Buenos Aires, Mario Poli, reveló algunas declaraciones que surgieron a partir de dos encuentros que mantuvo con el Papa Francisco en el Vaticano. Entre las más destacadas, se encuentra su negativa a irse a vivir al palacio pontificio: "¿Ahí? ¿Para que me afanen? ¡No!", aseveró Francisco. Cabe recordar que el Sumo Pontífice está viviendo en un hotel, el Hotel Santa Marta.
Del mismo modo, el arzobispo Poli manifestó el estado de ánimo del Papa: "Está con mucho entusiasmo, está hecho una Pascua". Poli se encargó de comparar a Bergoglio como Papa y a aquel que fuera antes de la elección pontificia: "Le cambió la cara de velorio bárbara que tenía, está muy contento." Y cuenta que lo cargaban diciéndole "allá nunca una sonrisa y acá sos una Pascua, repartís sonrisas para todo el mundo".
Mario Poli contó una anécdota que refuerza sus declaraciones: "Cuando Bergoglio iba a las villas, había tres sacramentos: la Eucaristía, la Confirmación y la foto. Las familias pasaban durante una hora y media para sacarse una foto. Un día un párroco le dijo al actual Papa: 'Si vas a venir con esa cara, nos vas a arruinar la foto a todos'".
Una de las conclusiones más tajantes que se trajo Mario Poli de su encuentro con Francisco es que "él ya no es más argentino. Allá lo cuidan mucho", y agregó que "es internacional, católico, universal, pero especialmente se lo han apropiado los tanos, que lo quieren mucho. Los italianos hablando del Papa Francisco es una cosa impresionante".