El ex juez Otilio Roque Romano fue detenido anoche por personal de Interpol en su departamento de Chile, luego de que la Corte Suprema de ese país aprobara su extradición a nuestro país, donde será juzgado por crímenes de lesa humanidad durante la última dictadura cívico militar.
Romano, quien se encuentra procesado por la Justicia mendocina, fue apresado a las 22:30 de ayer por la acusación de haber sido partícipe de 103 delitos no prescriptibles, por no haber denunciado o investigado violaciones a los derechos humanos de las que tomó conocimiento como funcionario judicial.
Romano fue trasladado a la Corte de Apelaciones de Santiago, donde quedará a disposición de la Justicia chilena mientras se analiza el pedido de extradición en su contra. La detención fue posible gracias a que ayer el juez de la Corte Suprema de Chile, Adalís Oyarzúnla, autorizó la extradición a la Argentina del acusado.
La Segunda Sala del alto tribunal ratificó de esta forma la decisión de primera instancia del juez Sergio Muñoz, que en junio determinó que existen presunciones fundadas de participación en los delitos que le imputa la justicia argentina, informó la prensa chilena. Romano es acusado en la Argentina como "partícipe primario" de 103 casos de violaciones de los derechos humanos cuando ocupaba el cargo de fiscal federal en la provincia de Mendoza, durante el último régimen militar.
En su fallo, el tribunal desestimó el planteo de la defensa de Romano, que había hecho alusión al principio de reciprocidad al recordar que la Argentina se negó previamente a entregar a Chile al ex guerrillero Galvarino Apablaza Guerra, procesado por el asesinato del senador Jaime Guzmán, ocurrido en 1991.