En Chile, cientos de pasajeros que tienen como destino viajar a Argentina tuvieron que pasar la noche en el aeropuerto de Santiago, tras la suspensión de los servicios de la estatal Intercargo a la aerolínea LAN. Una situación engorrosa similar ocurrió ayer con los viajeros locales, cuando la empresa debió cancelar los vuelos de Aeroparque debido a la misma medida adoptada por el Gobierno.
Ayer, la Justicia Civil y Comercial dictó una medida cautelar de no innovar en favor de la aerolínea LAN para que el Estado garantice el normal funcionamiento de las operaciones de la compañía. La decisión judicial surgió como respuesta a una advertencia del Gobierno, que había amenazado a la compañía aérea con quitarle el servicio de rampas -gestionado por Intercargo (ver recuadro) - en medio de una disputa judicial por una deuda.
Pese el fallo en su contra, el Ejecutivo desoyó a los tribunales e interrumpió el servicio de la firma estatal.
Los pasajeros, que tenían reservas en hoteles y comprados los pasajes hace meses aprovechando este largo fin de semana en Chile -del sábado hasta el miércoles-, evidenciaron su molestia y exigieron "respuestas y soluciones concretas a su problema".
La compañía trasandina añadió que "LAN Argentina cuenta con un contrato plenamente vigente con Intercargo por la provisión de los servicios hasta marzo de 2014, contrato que Intercargo se niega a cumplir a pesar de una orden judicial que le exige prestar los servicios".
Como compensación para los afectados, la empresa ofrece tres alternativas: la devolución total del valor de los boletos aéreos; cambio de fecha sujeto a disponibilidad de cabina en los siguientes 30 días de la fecha inicial de vuelo; y cambio de ruta sin multa pero sujeto al costo de diferencia de tarifa de la nueva ruta que el pasajero seleccione.
Sin embargo, estas opciones no satisfacen a los más de 600 pasajeros que no se mueven hace horas de la estación aérea de Pudahuel, en Santiago de Chile.
Los damnificados han hecho ver que "quieren viajar ahora" y que un cambio no los favorece, además de que no se les garantiza que tendrán un cupo en los vuelos de este sábado.
El conflicto
Las diferencias entre el Gobierno y LAN estallaron meses atrás, cuando la compañía estatal Intercargo bajo la intervención de María Cecilia García modificó unilateralmente las tarifas que paga la aerolínea por el servicio de rampas, necesario para poder operar.
La empresa alega que el contrato firmado está vigente y no se pueden modificar las condiciones sin un acuerdo de partes. El conflicto llegó a tribunales, donde la aerolínea e Intercargo libran una batalla judicial. Intercargo reclama una deuda de 18 millones de dólares.
Según explicaron fuentes judiciales a Infobae, en la resolución emitida el viernes al mediodía, el juez Saint Genez adelantó que multará a Intercargo por cada día que no cumpla con la obligación impuesta de garantizar las rampas para las partidas y los aterrizajes de los servicios de LAN.