Crece la fuga de cerebros en los países pobres

Una de cada cinco universitarios de las 48 naciones menos desarrolladas emigra en busca de empleo, informó la ONU. Hoy existen cerca de dos millones de inmigrantes intelectuales

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 EFE 163
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La Conferencia de Naciones Unidas sobre el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD) reveló que, todavía peor, en seis de esos 48 países el número de profesionales que residen dentro es menor con respecto a los que viven fuera.

El caso más extremo es el de Haití, con el 83% de las personas con educación universitaria residiendo fuera del país.

En su "Informe sobre los países menos adelantados 2012: Utilización de las remesas y los conocimientos de la diáspora para crear capacidades productivas", la UNCTAD estima que en los países desarrollados, la proporción de egresados de las universidades que emigra por motivos laborales es de uno entre cada veinticinco (el 4%).

En el polo opuesto se encuentran los 48 países menos desarrollados y concretamente Haití (con un 83% de intelectuales viviendo fuera del país), Samoa (73%), Gambia (68%), Tuvalu (65%) y Sierra Leona (51%), los seis países con más profesionales formados residiendo fuera que dentro del país.

Por otra parte, el informe de la UNCTAD indica que las remesas hacia los 48 países menos desarrollados se multiplicaron por ocho entre 1990 y 2011, pasando de 3.500 millones a 27.000 millones de dólares.

Éstas representan así el 4,4% del Producto Interior Bruto y el 15% de los ingresos por exportaciones de esos países.

Sin embargo, la UNCTAD advirtió de que los beneficios de las remesas pueden ser sobrepasados por los efectos adversos de la fuga de cerebros, ya que este fenómeno acentúa las desigualdades internacionales en cuanto a disponibilidad de trabajadores cualificados y perspectivas de crecimiento.

Con el objetivo de paliar estas diferencias, el organismo propone un sistema de transferencia de conocimientos consistente en un instrumento financiero dirigido a ciudadanos originarios de alguno de los países menos desarrollados que viven y trabajan en otros países.

La meta será atraer a nacionales altamente cualificados y residentes en otros países que estén dispuestos a invertir en áreas de generación de conocimiento en su país de origen.

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