Carmen González es la dueña de este popular restaurante situado en Lima, Perú, que hace más de 15 años vende lo que en el lugar se conoce como un buen sustituto del Viagra: el licuado de rana.
Este singular preparado lleva aproximadamente 20 ingredientes, entre ellos caldo de porotos blancos, miel, aloe vera, malta, maca (una raíz supuestamente afrodisíaca) y algunas veces vino. Además, claro, del agregado fundamental: licuado de rana viva.
Las ranas, que -aseguran- provienen del famoso lago Titicaca, están a la vista del público en una pecera dentro del restaurante.
Cada vez que un turista o residente acude en busca del trago estrella, se "pesca" un anfibio del pequeño acuario, se mata de un golpe contra el suelo o la pared, se despelleja y luego se mete en una licuadora.
Por más desagradable que esto suene, el trago es un éxito: Carmen asegura que recibe un promedio de 80 personas por día en busca de este batido, y que incluso muchos lo toman`por la mañana, porque les garantiza "energías" para toda la jornada.