Pérez Corradi tiene varios expedientes judiciales en trámite ante los tribunales argentinos, entre ellos dos denuncias por "amenazas" que formuló Sebastián Forza, una de las víctimas del triple crimen, junto con Damián Ferrón y Leopoldo Bina.
Pero al mismo tiempo, un tribunal del Estado de Maine lo reclama por supuestamente "distribuir oxicodona e importar esa sustancia estupefaciente al territorio aduanero de Estados Unidos desde un lugar fuera del mismo".
Ante ese pedido, la Corte Suprema -según trascendió hoy- concedió la extradición, en un fallo firmado por los jueces Ricardo Lorenzetti, Elena Highton de Nolasco, Carlos Fayt, Enrique Petracchi, Juan Carlos Maqueda, Raúl Zaffaroni y Carmen Argibay.
La Corte confirmó un fallo de la jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado, quien en agosto de 2009 había acogido favorablemente el reclamo de la justicia norteamericana.
La investigación se inició a raíz de que la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA) detectó que en 2007 Pérez Corradi habría exportado unas 1.500 pastillas de oxicodona, lo que habría constituido el delito de "confabulación" para el uso ilegal de sustancias estupefacientes.
Para el trámite ante la Corte, Pérez Corradi cambió de abogados: cesó en el cargo al ex policía y acusado por la voladura de la AMIA Juan José Ribelli y designó en su lugar a Carlos y Natalí Broitman.
En diciembre pasado, el juez federal Norberto Oyarbide lo procesó por blanquear "activos recaudados ilegalmente" supuestamente por el empresario farmacéutico Néstor Lorenzo, el detenido dirigente gremial bancario Juan José Zanola y el fallecido Sebastián Forza.