La historia de Paolo, o Titán Paul, salió a la luz cuando un periódico de su localidad natal, Venegono Inferiore (al norte de Italia) se hizo eco de su blog, según publicó el sitio ABC.es.
Así se presenta este adolescente: "Buenos días, me llamo Paolo y soy un chico del 95". Si bien podría tratarse de la introducción a la página personal de cualquier chico, este no es el caso, ya que Paolo está recuperándose de una operación en la que le extirparon un osteosarcoma, es decir, un tumor, de la rodilla.
En su bitácora cuenta cómo son sus días en silla de ruedas, siempre sin perder el humor. Como le colocaron una rodilla de titanio, se ríe de sí mismo: "Soy un hombre biónico. Ahora a ver cómo hago cuando el próximo verano tenga que ir a visitar a los abuelos en avión, al embarcar seguro que suena la sirena. ¡Se imaginan, pensarán que soy un terrorista!".
También relata su experiencia con la quimioterapia. "Esta mañana he despertado a las 7 para ir al hospital de Tradate donde me esperaba con jeringas y probetas, Albertina, mi enfermera preferida", puede leerse.
La idea de crear un blog para que Paolo pueda expresar sus sentimientos fue sus padres, Piercarlo y Rosanna, quienes consideraron que ésta era una buena manera de que esté comunicado con amigos y compañeros de clase. En su escuela también instalaron una cámara web para que puedan verse.
Para Piercarlo, el blog "ha enfatizado las ganas de vivir" del adolescente, desde que en el verano europeo pasado le detectaron el tumor. Cuando Paolo no puede escribir, él toma la posta de la bitácora. "Increíble, le acaban de operar y sólo piensa en comer", detalló luego de que saliera del quirófano.
Los últimos exámenes médicos confirmaron que el 90% de las células tumorales desaparecieron. "Estoy muy contento, ahora sólo me quedan nueve ciclos de 'quimio' y en el podio estaré yo", escribió Titán Paul al respecto.
Así abrió su corazón en uno de sus post: "Antes de tener esta enfermedad, cuando veía a personas con malformaciones me reía a escondidas y, sin ningún motivo, pensaba que esas personas tenían muy mala suerte. Ahora he entendido que en este mundo puede pasar de todo y no se sabe en qué momento de la vida".