Todos los trámites que debes realizar para vender un coche heredado

El primer paso, según indica la DGT, es notificar el fallecimiento del titular del vehículo en la Jefatura de Tráfico más próxima, dentro de los 90 días siguientes a la defunción

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Varios coches en un concesionario (Imagen Ilustrativa Infobae)
Varios coches en un concesionario (Imagen Ilustrativa Infobae)

Vender un coche heredado implica una serie de pasos legales que pueden resultar particularmente abrumadores en medio del dolor por la pérdida de un ser querido. Esta tarea, especialmente en el contexto español, requiere de una atención meticulosa por parte del heredero, ya que se enmarca dentro de un proceso complejo que abarca desde la obtención de documentos necesarios hasta la liquidación de distintos impuestos. La Real Automóvil Club de España (RACE) y la Dirección General de Tráfico (DGT) proporcionan una guía esencial para navegar este camino.

El primer paso, según indica la DGT, es notificar el fallecimiento del titular del vehículo en la Jefatura de Tráfico más próxima, dentro de los 90 días siguientes a la defunción. Este trámite es fundamental, considerando que actualmente en España hay más de un millón de vehículos que continúan registrados a nombre de personas fallecidas.

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La documentación inicial es crucial y debe ser recopilada con diligencia. Entre los documentos necesarios se encuentra el certificado de defunción, que prueba el fallecimiento y establece la relación legal con el difunto. Si existe un testamento que designa al heredero del vehículo, también debe presentarse. Adicionalmente, es preciso disponer del permiso de circulación del vehículo, el informe favorable de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) y el justificante de haber abonado la tasa de transferencia, actualmente fijada en 55,70 euros.

Una vez reunida esta documentación, el heredero debe gestionar el cambio de titularidad ante la DGT, proceso que requiere de una cita previa. Este cambio de titularidad es indispensable para poder circular legalmente con el vehículo y, eventualmente, proceder a su venta. Cabe destacar que, en caso de venta, será necesario realizar dos transferencias de titularidad: del fallecido al heredero y del heredero al nuevo propietario.

Coches en un concesionario (Imagen Ilustrativa Infobae)
Coches en un concesionario (Imagen Ilustrativa Infobae)

El aspecto tributario es uno de los más complejos en la venta de un coche heredado. La transmisión de bienes por herencia está sujeta al Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, cuya cuantía varía en función de la comunidad autónoma donde se realice la transacción. Además, en algunas regiones se aplica el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales por la venta de vehículos usados.

Es recomendable solicitar un informe gratuito en la DGT sobre la situación administrativa del vehículo. Este informe puede revelar posibles impedimentos para la transferencia o circulación del vehículo. En caso de existir cargas pendientes, el heredero puede pedir un informe detallado, cuyo costo es de 8,67 €, para asegurarse de que el automóvil esté libre de deudas.

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Liquidar el impuesto de circulación

Antes de proceder con la venta, también es necesario liquidar el impuesto de circulación correspondiente al año en curso y cancelar la póliza de seguro asociada al vehículo. Este paso es crucial para evitar responsabilidades legales futuras y asegurar que el comprador adquiera el coche libre de cargas fiscales.

Es importante tener en cuenta que, además de los trámites mencionados, puede ser necesario reunir otros documentos, como el libro de mantenimiento y facturas de reparaciones, que aporten valor al vehículo y faciliten la transacción.

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